Este lugar está vinculado a un culto pagano que se hunde en la oscuridad de los tiempos. Las primeras referencias escritas a este culto datan de 1391. En algunos lugares de Galicia a la Vía Láctea se le denomina Camiño de Santo André.
Este lugar estuvo relacionado con el señorío de los Condes de Traba. Fue pequeño monasterio, regido desde 1196 por la Orden de San Juan de Jerusalem. Posteriormente pasó a manos de los Andrade.
La tradición señala la obligación de hacer romería hasta Santo André portando u n a piedra que se deja en uno de los múltiples milladoiros de la zona. Hay que beber de la fuente de los Tres Caños y pedir un deseo al Santo. Otras costumbres son adquirir los sanandresiños, típicas figuras en miga de pan, recolectar la herba de namorar y regresar de la peregrinación portando el ramo de Santo André.
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